Desde la Presidencia del Concejo Deliberante se acompaña la iniciativa que busca desalentar el uso de fuegos artificiales durante las tradicionales fiestas de Navidad y Año Nuevo, bajo el lema: “Más luces, menos ruido”.
Daños y riesgos de su uso:
- Los fuegos artificiales liberan gases contaminantes.
- La contaminación acústica condiciona y tensiona a personas con trastornos del espectro autista (TEA). También,afecta a adultos mayores y personas convalecientes. Además, genera situaciones de angustia y estrés a recién nacidos, bebés y niños.
- Las mascotas y animales silvestres tienen una capacidad auditiva mayor que la de los seres humanos. Los estruendos provocados por los fuegos artificiales afectan sus sentidos, las perturban y atemorizan e, incluso, les pueden causar la pérdida de la audición y ponerlas agresivas con las personas que las rodean. Asimismo, no se descarta que puedan llegar a morir por paros cardíacos o atropellados al escapar a raíz del miedo generado por las explosiones.
Si hay daño, no es divertido. Seamos responsables.